miércoles, 20 de julio de 2011

Wawa’s Gym: La Paz ya tiene un gimnasio exclusivo para bebés

Las manos de Emilio y Nicole se hunden en un recipiente de porotos. Luego de un momento sus pequeños puños han capturado dos o tres de ellos para encontrar un nuevo lugar en donde ponerlos.

Para muchos esto es sólo un juego, pero en el gimnasio para bebés Wawa’s Gym -ubicado en el Shopping Sur de La Florida- es un ejercicio de concentración y atención.

El aprendizaje adecuado de los niños de cero a un año depende de las experiencias a través de sus sentidos y movimientos. Ese es uno de los principales objetivos de este lugar en el que se estimula, a través de varias actividades, el desarrollo óptimo de los pequeños de acuerdo a su edad.

El significado de ir a este gimnasio poco tiene que ver con el peso. Se centra en ayudar a los bebés a hacer actividades que fortalezcan sus conocimientos.

Evaluación y desarrollo cerebral

Al nacer, el ser humano está ávido de información sobre su entorno y le gusta explorar. Sin embargo, los espacios para el desarrollo de sus capacidades como gatear -actividad muy importante para conectar los hemisferios izquierdo y derecho del cerebro- no suelen estar permanentemente al alcance de los padres que, a su vez, no siempre saben cómo estimular a sus hijos.

“La clave es el primer año porque el cerebro termina de crecer en ese tiempo. Cuando los padres llegan con sus niños generalmente lo hacen por esparcimiento pues muy pocos saben lo importante que es esta actividad para el desarrollo de su cerebro y, por consiguiente para su coordinación para la escritura, el lenguaje, las matemáticas y la lógica de pensamiento que empiezan a poner en práctica desde pequeños”, explica la fisioterapeuta y kinesióloga, Marcela Barragán, propietaria de Wawa’s Gym.

De esta forma, los padres se enteran que, a diferencia de otros lugares en donde sólo se realizan juegos, las sesiones en este gimnasio infantil tienen dos fines: la evaluación, con la que se determina el nivel de desarrollo que tiene el niño en la parte motora, social, emocional y cognitiva, y si éste corresponde a su edad.

Según la especialista, si el resultado revela que el desarrollo no coincide con la edad, no significa que exista algún problema sino que en su rutina cotidiana no tienen la oportunidad de moverse por largos periodos de tiempo, lo que se soluciona en pocas sesiones.

“Está probado que mientras más se mueven (los bebés), más conexiones tienen en el cerebro y más inteligentes pueden llegar a ser”, argumenta.

El otro fin es el esparcimiento con juegos con los que aprenden a tener equilibrio, coordinación y orientación, además de estimular su noción de espacio que los ayuda en la parte cognitiva y de concentración.

Más sociables

Ericka Gutiérrez, madre de Emilio, de ocho meses, cree que no sólo se trata de la inteligencia, sino de que el carácter mejora porque los bebés son más sociables y tranquilos, ya que están más seguros de sus movimientos y no son tan temerosos. Mientras su madre habla, Emilio mira la cámara fotográfica y se para sólo por unos segundos, con una gran sonrisa.

Cuando la hora de evaluación concluye, después de haber realizado el juego de los porotos que los ayuda a prestar atención y concentrarse, la música alegre comienza a sonar junto al baile de las madres con los pequeños en brazos para que desarrollen el ritmo y detenerse cuando la canción lo hace.

Los pequeños se conectan con las peticiones de las madres, que van desde seguir algunas instrucciones hasta aprender a incorporarse para fortalecer su columna.

Todo ello a través de juegos como pasar por túneles, o sostenerse sobre balones con la ayuda de sus brazos y piernas.

Carmen Barrios y su bebé Nicole, de ocho meses, llevan un mes en las clases. Antes la pequeña tenía miedo de socializar y ahora está más activa y de mejor humor, además de saber modelar para la cámara.

Todas las clases terminan con un momento de relajación para bajar el ritmo después de los juegos. Esta experiencia tiene la enseñanza implícita de enseñar a los niños cuándo calmarse, según la fisioterapeuta.

Barragán lleva diez años trabajando en estas terapias con los niños menores a un año. Hace sólo uno decidió relanzar las actividades con Wawa’s Gym, emprendimiento que además le permite ampliar los servicios a niños de hasta cuatro años, y también dar terapias individuales en casos especiales.

“Trabajar desde hace 18 años con el Centro de Educación para el Parto, Yuriña, me hace estar en contacto con la vida, esos momentos de ilusión y esperanza me motivaron para trabajar con los bebés”, finaliza Barragán.

Datos del desarrollo antes de cumplir un año
Atención Según la fisioterapeuta Marcela Barragán se tiende a afirmar que hay muchos niños que son maleducados, sin embargo, lo que pasa es que no tienen el hábito de atender, aspecto que se aprende.


Desarrollo Según Barragán en nuestro medio es muy común que los niños menores a un año estén atrasados en su desarrollo, entre uno y tres meses.


Desde un año Desde el año y hasta los cuatro, el gimnasio ofrece clases de psicomotricidad educativa y desarrollo del pensamiento en los juegos.


Las clases Waw’as Gym está ubicado en el nivel 3 del Shopping Sur en La Florida. Por 300 bolivianos mensuales, los niños menores a un año acceden a sesiones de una hora y media cada una, dos veces por semana. Y para menores de entre uno y cuatro años, la mensualidad es de 280 bolivianos.

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