lunes, 21 de abril de 2014

CLAUDIA GUERRA SOLIZ/// LA INSTRUCTORA DE ACROBATIC AFIRMA QUE EL POLE DANCE ES UN DEPORTE EXIGENTE,


“La sola idea de abrir un pole dance irritaba a mi padre. Tuve que enfrentarme con muchos tabúes en mi tierra pero valió la pena”, son algunas de las palabras que brotan de Claudia Guerra Soliz, quien a sus 35 años, es la gerente propietaria de la academia Acrobatic, una escuela de pole dance, o también conocido como el baile del tubo.

Claudia Guerra retornó de Alemania el 2010 con el titulo de instructurado bajo el brazo y la firme idea de abrir una escuela de pole dance en Cochabamba.

”Me inicié en esta actividad porque la vi como una forma de realizar un deporte en Alemania, para mi era un hobby que me permitía mantenerme bien, en forma, saludable y en buen estado físico; pero a medida que pasaba el tiempo se convirtió en mi pasión”, sostiene Guerra.

En algún momento la idea de que las mujeres cochabambinas comenzaran a practicar este nuevo “deporte” parecía lejano; es que por lo general este baile era asociado a presentaciones en night club.

Pero ahora las cosas han cambiado y la academia goza de la aceptación de la sociedad que no ve solo como un espectáculo visual sino que ahora lo están practicando como un deporte regular.

Actualmente la academia cumplió los tres años de intensa actividad y logró romper muchas barreras.

El pole dance requiere de mucho trabajo físico y también de bastante creatividad, al tratarse de una actividad artística. Esto es lo que ha ido cambiando de mentalidad a la sociedad.

“Ahora no solo son mujeres, de diferentes edades quienes llegan a la academia sino también los varones están empezando a practicar este deporte”, asegura Claudia.

De acuerdo a la experiencia de la instructora uno de los mayores y vitales requisitos para poder practicar este deporte es mucha motivación, perseverancia, ya que para ser francos no se trata de un deporte que ayude a bajar de peso inmediatamente, ya que la actividad que se desarrolla no es del tipo cardio.

“Al principio no es muy exigente, pues se enseñan pasos, posturas básicas y no se queman muchas calorías; pero, con el avance de niveles, se convierte en un deporte de alta intensidad, donde cada pirueta, figura y paso, requiere de mayor esfuerzo, mayores repeticiones. Ahí sí se baja de peso”.

La instructora dice que los deportistas ven el cambio físico, pues el pole dance es un deporte en el cual se ejercitan los músculos del cuerpo para poder subir o bajar, se tonifica el cuerpo, los glúteos, y otras partes.

Claudia Guerra también afirma que el pole dance no solo realiza transformaciones visuales sino cambios profundos de conducta y de personalidad, pues las personas que lo practican se sienten más segura, confiadas y sexys.

“A veces la autoestima es muy baja y con el tiempo y el trabajo la transformación también es interna, la seguridad y femineidad comienzan a aflorar y se empoderan de ellas mismas”.

Antes de finalizar la entrevista Claudia Guerra afirma que el pole es un deporte muy exigente, pero que brinda muchas satisfacciones a quienes lo practican.

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