Cómo depilarse las axilas

La piel de las axilas es muy delgada y los vellos son espesos. Por eso, es importante cuidar tu epidermis. Antes de la depilación, aplica un producto exfoliante y luego de la misma, utiliza una crema hidratante para prevenir las irritaciones y evitar que aparezcan granos.

La rasuradora manual o eléctrica consiste en el método más utilizado para hacer desaparecer los vellos. Es rápido e indoloro, ya que se secciona el vello encima de la raíz. Para un ablandamiento óptimo del mismo, se recomienda efectuarlo bajo la ducha. Sin embargo, el resultado es de corta duración y necesitas rasurarte frecuentemente, es decir, aproximadamente cada 2 días.

Si tienes la piel muy frágil, no dudes en utilizar una crema depilatoria. Produce el mismo efecto que la rasuradora, pero la epidermis se mantiene suave y el resultado es un poco más duradero. Asimismo, no existen riesgos de cortes. Sin embargo, estas cremas suelen tener un olor fuerte, el cual puede incomodar a algunas personas. Toma en cuenta que antes de utilizar este producto, es necesario aplicarlo en una zona pequeña de tu piel para ver si no tienes reacciones alérgicas al mismo.

Las personas más valientes, pueden optar por el uso de cera fría o tibia. La primera opción es muy práctica, se utiliza rápidamente y no quema. Es eficaz tanto para el vello corto como largo. Sin embargo, es doloroso. En cuanto a la cera tibia, es un método natural e higiénico que permite una depilación limpia y de larga duración. Para facilitar su aplicación, coloca la cera en el sentido de crecimiento del vello. Para la parte superior de las axilas, distribúyela de abajo hacia arriba y saca la tira en el sentido contrario. Para la inferior, aplica la cera de arriba hacia abajo.



Cuidados óptimos y duraderos para la piel

al depilarse Los cambios hormonales actúan sobre la sensibilidad de nuestra piel. Durante la menstruación, la circulación sanguínea incrementa, lo que duplica la percepción del dolor. Por lo tanto, es aconsejable depilarse fuera del ciclo menstrual o utilizar métodos menos dolorosos como la rasuradora o crema depilatoria. Por otro lado, la depilación provoca irritaciones en la piel y en algunos casos, inflamaciones. De esta manera, es primordial adoptar cuidados óptimos antes de depilarse para prevenir estos inconvenientes y luego del acto, para preservar una epidermis suave.