lunes, 16 de noviembre de 2015

Consigue una piel perfecta con leche en polvo

La leche nos puede ayudar a conseguir una piel suavecita, hidratada, bien nutrida y reparada, esto se debe a los cientos de nutrientes y vitaminas que ésta contiene. Seguramente algún día en tu infancia te dijeron que para crecer sano y fuerte debías de consumir mucha leche pues en este artículo te decimos que para tener una piel sana y resistente debes de aplicar mucha leche.

Desde tiempos remotos la leche ha sido utilizada para mantener una piel de "muñeca", inclusive según manuscritos antiguos la reina Cleopatra se realizaba baños con leche de burra para mantener la juventud de la misma. Además los baños de leche y rosas son un tanto comunes para las personas amantes del cuidado personal, sin embargo no vamos a desperdiciar tanta leche para mantener una piel linda y joven, con algunas cucharadas de leche en polvo podemos lograr la piel que siempre soñamos.

La leche contiene ácido láctico el cual es conocido por su maravillosa acción exfoliante por lo que mejora la textura de la piel mediante la hidratación, además ayuda a proveer la producción de colágeno y elimina la capa de células muertas que suelen obstruir los poros. El ácido láctico reduce considerablemente las líneas de expresión y las arrugas, también ayuda a emparejar el tono de la piel y a reducir las cicatrices del acné.

La leche además de todos los beneficios que puede aportar, es excelente para tratar con las pieles sensibles e intolerantes lo cual lo hace un ingrediente perfecto para realizar mascarillas suavizantes, hidratantes y reparadoras. Ahora te daremos algunas recetas y métodos para aplicar la leche y lograr una piel soñada y como de muñequita.



Baños de leche

Los baños con miel te ayudarán a suavizar y nutrir profundamente tu piel. Agrega 1 taza de leche en polvo a tu baño y relájate durante 20 minutos.

Crema

Para reparar y prevenir la aparición de arrugas realiza esta mezcla.

Ingredientes:

2 cucharadas de leche en polvo

2 cucharadas de leche líquida

2 cucharadas de miel

Mezcla la leche en polvo, la leche líquida y la miel hasta formar una pasta espesa y con textura de crema. Aplica dicha crema en el cutis y realiza masajes circulares ascendentes, deja actuar 20 minutos y retira con abundante agua y una espuma limpiadora, posteriormente aplica tu crema hidratante.

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