sábado, 8 de octubre de 2016

Cuidados de la piel Adiós a la flacidez del cuello

El cuello suele ser el eterno olvidado de las mujeres, ya que en muchas ocasiones no recibe el mismo cuidado que el resto del cuerpo, pero debe saber que al igual que el rostro y las manos revelan la edad de una persona. Sin embargo, eso se puede evitar con una rutina diaria de cuidados que ayudará a evitar la flacidez y permite lucir el cuello joven y esbelto por más tiempo.

El error más frecuente. La falla más común en las mujeres es que se enfocan en cuidar solo el rostro olvidando así el cuello, siendo esta la zona que tiene la piel más fina, delicada, sensible e irritable, por lo que el proceso de envejecimiento es más rápido, debido a la pérdida de colágeno y elastina.

La crema hidratante. Para cuidar la piel del cuello es importante que tenga en cuenta que puede usar las mismas cremas hidratantes de rostro que ocupa en la rutina de belleza a diario, asimismo, no es recomendable que se utilice las cremas antiarrugas porque son muy potentes y pueden tener sustancias que dañen la piel.

Cuidados importantes para el cuello. El ejercicio es una clave fundamental para combatir la flacidez y las molestas rayas que aparecen. Una de las rutinas que puede realizar es pronunciar todas las vocales abriendo la boca lo más que pueda, otro muy efectivo también es sacar la lengua y tratar de tocarse la punta de la nariz. También puede aplicar una dosis de miel sobre la zona y dejar actuar durante 20 minutos y lavar con agua fría, las propiedades hidratantes ayudan a combatir la pérdida de firmeza.

La especialista aconseja. La cosmetóloga de la Estética y Spa Heaven Center, Carla Adriázola, señaló que la flacidez o papada se lo puede tratar desde la comodidad del hogar con masajes sencillos, pero también aseguró que existen tratamientos estéticos llamados radiofrecuencia multipolar (Venusfreeze). "Este tratamiento se encuentra dentro de un paquete de rejuvenecimiento que trabaja el cuello y área facial, tiene una duración de 12 sesiones.

1. Limpieza. Eliminar el maquillaje con agua y luego exfoliar con avena para retirar las impurezas.

2. Mascarilla. Utilizar ingredientes como la manzana o palta para limpiar, nutrir o purificar la zona.

3. Masajes. Debe aplicarse con movimientos circulares, además de hacer los ejercicios con movimientos laterales.

4. Hidratar. Utilizar cremas hidratantes que tengan retinol o vitamina A, para estimular la producción de colágeno.

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